Te gustaría hacer cambios en la decoración para este fin de año


Sigue estos sencillos consejos:

      1.       Mueve los muebles de lugar, esto te dará una sensación inmediata de cambio.

2.       Busca en otras habitaciones muebles u objetos que puedas incorporar.

3.       Sustituye las flores artificiales por naturales, o incorpora ramas que puedes obtener de tu jardín o del parque.

4.       Elimina el exceso de objetos de estantes o paredes, recuerda: “Menos es más”

5.       Busca entre tus cosas objetos que puedas incluir, en ocasiones tenemos guardados objetos simples que podemos renovar y que le dan un toque especial a la decoración.

6.       Recuerda jugar con la iluminación, hazlo a través de la incorporación de luces indirectas, ya sea a través de lámparas de mesa o luces dirigidas, o si lo prefieres las velas son una excelente opción, ya que además nos proporcionan un olor agradable.

7.       Visita páginas y blogs de decoración en internet, ahí podrás encontrar ideas simples de realizar.

8.       Es importante que consideres que el espacio tenga un olor agradable, para ello puedes utilizar un difusor, en el mercado existen de diferentes formas, tamaños y estilos, así como distintos aromas de acuerdo a tu personalidad.

9.       Para que tu espacio se vea sofisticado juega con las texturas, ya sea con cojines, cortinas, y los elementos que incluyas en la decoración.

10.   Por último toma en cuenta que todos los artículos se encuentren en buenas condiciones y funcionen perfectamente. Elimina los vidrios rotos, aparatos descompuestos, rechinidos de puertas, cables sueltos y proyectos inconclusos, ya que estos demeritan tu decoración.

Anímate, te deseamos mucho éxito en tu nuevo proyecto.

Cinco consejos sobre el uso de colores y las sensaciones que provocan


Si estás pensando en hacer un cambio en la decoración de tus paredes para este fin de año, te recomendamos que tengas en cuenta antes algunas cosas…



Es importante que pienses cómo quieres sentirte en cada espacio: recuerda que no hacemos las mismas cosas en el dormitorio que en la cocina o en la sala.

 

Uno. No te precipites, pasa unos minutos en cada habitación y visualiza cómo te gustaría que se viera y que quieres sentir al estar en ella.

Dos. Haz pruebas de color, puedes utilizar diferentes telas o accesorios que tengas a mano o realiza distintas pinceladas a las paredes, muebe los accesorios y muebles y mira cómo quedarían y haz un listado de las cosas que te sobran o que te harían falta, en muchas ocasiones contamos con ellos solamente que los tenemos guardados o puestos en otra habitación. Una vez te decidas a pintar, dar marcha atrás es más complicado.

Tres. Dale una oportunidad a los papeles pintados, vinilos, panelados… Y ten en cuenta que tonos neutros o suaves en las paredes, te permiten incorporar mobiliario o decoración en colores muy marcados que reflejen tu estilo único.

Cuatro. Los rojos, rosas y naranjas, son cálidos y acogedores; atrevidos, enérgicos y ayudan a nuestra creatividad. Los recomendamos para zonas de estar, comedores o despachos. Para estos últimos se utilizan también mucho los tonos amarillos.

Cinco. Por otra parte, los verdes, azules o violetas, son colores más tranquilos, relajantes y serenos… por eso son los más utilizados para dormitorios y zonas de descanso.

Ahora sí manos a la obra usa tu creatividad para realizar combinaciones, tus opciones son infinitas, o si lo prefieres, recuerda que en Maquillaje para tu casa te podemos brindar el servicio de asesoría en decoración de interiores.


 

Aprende a escoger los muebles de tu sala

Una cosa que usted necesita hacer cuando está planeando su sala es asegurarse de maximizar el potencial de la habitación. Es importante elegir su mobiliario asegurándose de que todo va a encajar en la habitación.
Usted no quiere tener un diseño y comprar un montón de muebles que realmente no encajen con lo que está tratando de lograr con la habitación.
 
 


Todo lo que integre deberá ser lo más funcional y cómodo, ya que esa es la habitación donde va a pasar la mayor parte de su tiempo. Cada vez que tenemos invitados, usted puede estar seguro de que van a querer pasar el rato en su sala para ponerse al día sobre lo que está pasando en su vida.

 
 


Una cosa que hay que recordar cuando se trata de los muebles en su sala es el espacio para que las puertas se puedan abrir.
 
Siempre es bueno mantener los muebles lejos de las puertas porque da la apariencia de que el espacio es mucho más grande.
 

Tips

1.      Mida el espacio antes de comprar los muebles que desea colocar, así como el espacio de los pasillos, escaleras y puertas para asegurarse de que los va a poder ingresar.

2.      Recuerde que la moda es pasajera por lo que es preferible comprar sus muebles en tonos tradicionales que pueda combinar con cualquier color.

3.      Mantenga los muebles lejos de las puertas, para asegurarse que no se van a golpear al abrir o cerrar.

4.      Es importante tomar en cuenta las dimensiones de su espacio a la hora de comprar los muebles ya que es indispensable que pueda desplazarse con comodidad.

5.      Tome en consideración la funcionalidad del espacio, por ejemplo si requiere de reuniones constantes necesitará más lugar para sentarse.

6.      Tome en consideración las edades de los usuarios o si cuentan con mascotas para la elección de los textiles.

 
 

Participa en el sorteo de un difusor

Danos tu opinión sobre el tema de un artículo que te gustaría que publicáramos y participa en el sorteo de un difusor.

Tienes como fecha límite el día 20 de diciembre del 2012.
Válido en México D.F.
¡Mucha suerte!

Día de Muertos


Día de Muertos

 


El Día de Muertos es una celebración mexicana de origen prehispánico que honra a los difuntos el 2 de noviembre, comienza desde el 1 de noviembre, y coincide con las celebraciones católicas de Día de los Fieles Difuntos y Todos los Santos.

Es una festividad mexicana, que se celebra también en algunos países de América Central, así como en muchas comunidades de los Estados Unidos, donde existe una gran población mexicana y centroamericana. La Unesco ha declarado la festividad mexicana como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.[1] El Día de Muertos es un día festejado también en Brasil, como Día dos Finados, aunque esta festividad no tiene las mismas raíces prehispánicas que la festividad mexicana.

Los orígenes de la celebración del Día de Muertos en México son anteriores a la llegada de los españoles. Hay registro de celebraciones en las etnias mexica, maya, purépecha y totonaca. Los rituales que celebran la vida de los ancestros se realizan en estas civilizaciones por lo menos desde hace tres mil años. En la era prehispánica era común la práctica de conservar los cráneos como trofeos y mostrarlos durante los rituales que simbolizaban la muerte y el renacimiento.

El festival que se convirtió en el Día de Muertos se conmemoraba el noveno mes del calendario solar mexica, cerca del inicio de agosto, y se celebraba durante un mes completo. Las festividades eran presididas por la diosa Mictecacíhuatl, conocida como la "Dama de la Muerte" (actualmente relacionada con "la Catrina", personaje de José Guadalupe Posada) y esposa de Mictlantecuhtli, Señor de la tierra de los muertos. Las festividades eran dedicadas a la celebración de los niños y las vidas de parientes fallecidos.

La vida y la muerte son un símbolo emblemático que ha causado admiración, temor e incertidumbre al ser humano a través de la historia. Por muchos años, en diversas culturas se han generado creencias en torno a la muerte que han logrado desarrollar toda una serie de ritos y tradiciones ya sea para venerarla, honrarla, espantarla e incluso para burlarse de ella. México es un país rico en cultura y tradiciones; uno de los principales aspectos que conforman su identidad como nación es la concepción que se tiene sobre la vida, la muerte y todas las tradiciones y creencias que giran en torno a ellas.

De cualquier modo, hay que destacar que esta celebración no es propia de todos los mexicanos puesto que, pese a ser una fiesta que se ha convertido en un símbolo nacional y que como tal es enseñada (con fines educativos) en las escuelas del país, existen muchas familias que son más apegadas a celebrar el “Día de todos los Santos” como lo hacen en otros países católicos. Además, cabe mencionar la fuerte influencia de los Estados Unidos que, al menos en zonas fronterizas, se evidencia con la presencia de la fiesta conocida como Halloween, la cual se celebra cada año con más frecuencia y en un mayor número de hogares. De ahí también que exista una inquietud entre los propios mexicanos de querer preservar el Día de Muertos como parte de la cultura mexicana sobre otras celebraciones parecidas.

Sin embargo muchos mexicanos consideran que el día de muertos al ser una fiesta sincrética es capaz de convivir y adoptar otros festejos no tradicionales de manera sana, permitiendo el uso de los disfraces, sin restar su importancia cultural y ni poner en riesgo su existencia en México.

La celebración en el mundo prehispánico




Pintura "La Catrina" sobre una de las calles de Guaymas, México.

Para los antiguos mesoamericanos, la muerte no tenía las connotaciones morales de la religión católica, en la que las ideas de infierno y paraíso sirven para castigar o premiar. Por el contrario, ellos creían que los rumbos destinados a las almas de los muertos estaban determinados por el tipo de muerte que habían tenido, y no por su comportamiento en la vida.

De esta forma, las direcciones que podrían tomar los muertos son:

El Tlalocan o paraíso de Tláloc, dios de la lluvia. A este sitio se dirigían aquellos que morían en circunstancias relacionadas con el agua: los ahogados, los que morían por efecto de un rayo, los que morían por enfermedades como la gota o la hidropesía, la sarna o las bubas, así como también los niños sacrificados al dios. El Tlalocan era un lugar de reposo y de abundancia. Aunque los muertos generalmente se incineraban, los predestinados a Tláloc se enterraban, como las semillas, para germinar.

El Omeyocan, paraíso del sol, presidido por Huitzilopochtli, el dios de la guerra. A este lugar llegaban sólo los muertos en combate, los cautivos que se sacrificaban y las mujeres que morían en el parto. Estas mujeres eran comparadas a los guerreros, ya que habían librado una gran batalla, la de parir, y se les enterraba en el patio del palacio, para que acompañaran al sol desde el cenit hasta su ocultamiento por el poniente. Su muerte provocaba tristeza y también alegría, ya que, gracias a su valentía, el sol las llevaba como compañeras. Dentro de la escala mesoamericana de valores, habitar el Omeyocan era un privilegio.

El Omeyocan era un lugar de gozo permanente, en el que se festejaba al sol y se le acompañaba con música, cantos y bailes. Los muertos que iban al Omeyocan, después de cuatro años, volvían al mundo, convertidos en aves de plumas multicolores y hermosas.

Morir en la guerra era considerada como la mejor de las muertes por los mexicas. Para ellos, a diferencia de otras culturas, dentro de la muerte había un sentimiento de esperanza, pues ella ofrecía la posibilidad de acompañar al sol en su diario nacimiento y trascender convertido en pájaro.

El Mictlán, destinado a quienes morían de muerte natural. Este lugar era habitado por Mictlantecuhtli y Mictecacíhuatl, señor y señora de la muerte. Era un sitio muy oscuro, sin ventanas, del que ya no era posible salir.

El camino para llegar al Mictlán era muy tortuoso y difícil, pues para llegar a él las almas debían transitar por distintos lugares durante cuatro años. Luego de este tiempo, las almas llegaban al Chicunamictlán, lugar donde descansaban o desaparecían las almas de los muertos. Para recorrer este camino, el difunto era enterrado con un perro llamado xoloescuincle(raza canina sin pelo), el cual le ayudaría a cruzar un río y llegar ante Mictlantecuhtli, a quien debía entregar, como ofrenda, atados de teas y cañas de perfume, algodón (ixcátl), hilos colorados y mantas. Quienes iban al Mictlán recibían, como ofrenda, cuatro flechas y cuatro teas atadas con hilo de algodón.




Detalle de un altar de muertos.

Por su parte, los niños muertos tenían un lugar especial, llamado Chichihuacuauhco, donde se encontraba un árbol de cuyas ramas goteaba leche, para que se alimentaran. Los niños que llegaban aquí volverían a la tierra cuando se destruyese la raza que la habitaba. De esta forma, de la muerte renacería la vida.

Los entierros prehispánicos eran acompañados de ofrendas que contenían dos tipos de objetos: los que, en vida, habían sido utilizados por el muerto, y los que podría necesitar en su tránsito al inframundo. De esta forma, era muy variada la elaboración de objetos funerarios: instrumentos musicales de barro, como ocarinas, flautas, timbales y sonajas en forma de calaveras; esculturas que representaban a los dioses mortuorios, cráneos de diversos materiales (piedra, jade, cristal), braseros, incensarios y urnas.

Las fechas en honor de los muertos son y eran tan importantes que les dedicaban dos meses. Durante el mes llamado Tlaxochimaco se llevaba a cabo la celebración denominada Miccailhuitontli o fiesta de los muertitos, alrededor del 16 de julio. Esta fiesta iniciaba cuando se cortaba en el bosque el árbol llamado xócotl, al cual le quitaban la corteza y le ponían flores para adornarlo. En la celebración participaban todos, y se hacían ofrendas al árbol durante veinte días.

En el décimo mes del calendario se celebraba la Ueymicailhuitl o fiesta de los muertos grandes. Esta celebración se llevaba a cabo alrededor del 5 de agosto, cuando decían que caía el xócotl. En esta fiesta se realizaban procesiones que concluían con rondas en torno al árbol. Se acostumbraba realizar sacrificios de personas y se hacían grandes comidas. Después, ponían una figura de bledo en la punta del árbol y danzaban, vestidos con plumas preciosas y cascabeles. Al finalizar la fiesta, los jóvenes subían al árbol para quitar la figura, se derribaba el xócotl y terminaba la celebración. En esta fiesta, la gente acostumbraba colocar altares con ofrendas para recordar a sus muertos, lo que es el antecedente del actual altar de muertos.[2]

Desde antes de la llegada de los españoles, antes de que la religión católica fuera impuesta en Mesoamérica, muchas de las culturas prehispánicas tenían la creencia de una vida después de la muerte. Por ejemplo, de acuerdo a Luis Ramos, en su libro Culturas Clásicas Prehispánicas en la cultura maya, cuando una persona moría, su alma iba al “inframundo” (conocido por ellos como Xibalbá). Según sus creencias, para llegar a este lugar, las almas debían de cruzar un río con la ayuda de un xoloitzcuintle (raza de perro); es por eso que dentro de los ritos funerarios de los mayas se encontraba el de enterrar a un perro de esta raza junto con la persona fallecida, de lo contrario, correría el riesgo de no llegar a Xibalbá y quedarse en el camino. Después, esta creencia se vio reafirmada con la introducción a la cultura de la religión católica; de acuerdo a la religión católica (religión predominante en México) existe la idea de un cielo y un infierno a donde las almas se dirigen cuando uno muere (dependiendo de su comportamiento en vida), es decir, la creencia de una vida después de la muerte.[3]

Transformación del ritual


Cempasúchil, Flor típica usada para ornato.

Cuando llegaron a América los españoles en el siglo XVI trajeron sus propias celebraciones del Día de Muertos cristianas y europeas, donde se recordaba a los muertos en el Día de Todos los Santos. Al convertir a los nativos del nuevo mundo se dio lugar a un sincretismo que mezcló las tradiciones europeas y prehispánicas, haciendo coincidir las festividades católicas del Día de todos los Santos y Todas las Almas con el festival similar mesoamericano, creando el actual Día de Muertos.





Xantolo

 
El Xantolo es un palabra huasteca que significa Fiesta de las ánimas, tiene un origen prehispánico en la Región Huasteca y que al paso de los años ha recibido influencias de otros orígenes, los huastecos ofrendan el culto en estos tiempos porque no solo recogen la cosecha del maíz y otros frutos, también es una fiesta de respeto a los que ya no están presentes porque acorde a su calendario, en estas fechas los parientes muertos visitan a los familiares. La esencia de sus espíritus están presentes y por ello el olor de las frutas, la música y la luz, recuerdan los momentos vividos en la tierra, in inframundo está presente todo el tiempo y es muy cercano al mundo de los vivos según los huastecos, el cuerpo regresa a la tierra pero su alma se queda entre los vivos.

Calaveritas

Se les llama así tanto a las rimas, versos satíricos como a los grabados que ilustran calaveras disfrazadas o bien de dulce descritas a continuación:

  • Rimas. también llamadas "calaveras", son en realidad epitafios humorísticos de personas aún vivas que constan de versos donde la muerte (personificada) bromea con personajes de la vida real, haciendo alusión sobre alguna característica peculiar de la persona en cuestión. Finalizan con frases donde se expone que se lo llevará a la tumba. Es muy común dedicar las "calaveritas" a personajes públicos, en especial a políticos en el poder. En muchos casos la rima habla del aludido como si estuviera ya muerto.

  • Grabados: Litografías, generalmente del Maestro José Guadalupe Posada, que aunque no dibujó específicamente para Día de Muertos, sino eran caricaturas con que colaboraba en diferentes publicaciones de principios del siglo XX en México se usan en estas fechas por sus alusiones a la muerte festiva.

  • De dulce: Son dulces en forma de cráneo, generalmente realizadas de dulce de azúcar, chocolate, amaranto, gomita, entre otros. Generalmente son vendidas en los tradicionales mercados denominados "Todos Santos" además de tiendas comerciales, tianguis, etc.

Simbolismo

  • Las Calaveras de dulce, tienen escritos el nombre del difunto (o en algunos casos de personas vivas, en forma de broma modesta que no ofende en particular al aludido) en la frente, son consumidas por parientes o amigos.

  • El Pan de muerto. Platillo especial del Día de Muertos. Es un panecillo dulce que se hornea en diferentes figuras, desde simples formas redondas hasta cráneos, adornado con figuras del mismo pan en forma de hueso y se espolvorea con azúcar.

  • Las Flores. Durante el período del 1 al 2 de noviembre las familias normalmente limpian y decoran las tumbas con coloridas coronas de flores de rosas, girasoles, entre otras, pero principalmente de Cempaxúchitl, las cuales se cree atraen y guían las almas de los muertos. Casi todos los panteones son visitados.

  • La Ofrenda y la visita de las almas. Se cree que las almas de los niños regresan de visita el día primero de noviembre, y las almas de los adultos regresan el día 2. En el caso de que no se pueda visitar la tumba, ya sea porque ya no existe la tumba del difunto, o porque la familia está muy lejos para ir a visitarla, también se elaboran detallados altares en las casas, donde se ponen las ofrendas, que pueden ser platillos de comida, el pan de muerto, vasos de agua, mezcal, tequila, pulque o atole, cigarros e incluso juguetes para las almas de los niños. Todo esto se coloca junto al retrato de los difuntos rodeados de veladoras.

Ofrenda de Muertos

 

Los materiales comúnmente utilizados para hacer una ofrenda de muertos para el Día de Muertos tiene un significado, y son entre otros los siguientes:

  • Retrato de la persona recordada: El retrato del difunto sugiere el ánima que los visitará la noche del 2 de noviembre.
  • Pintura o cromo de las Ánimas del Purgatorio: La imagen de las ánimas del purgatorio sirve para pedir la salida del purgatorio del alma del difunto por si acaso se encontrara ahí.
  • Doce cirios: Aunque pueden ser menos, tienen que ser en pares, y preferiblemente de color morado, con coronas y flores de cera. Los cirios, sobre todo si son morados, son señal de duelo. Los cuatro cirios en cruz representan los cuatro puntos cardinales, de manera que el ánima pueda orientarse hasta encontrar su camino y su casa aparte de agua y sal.
  • Flor de cempasúchil (o flor de cuatrocientos pétalos): Su color representa la luz como los rayos del sol y al regarla en forma de camino se le indica a las almas el rumbo por el cual se le guía a casa.
  • Cruz de tierra: Para recordarle su fe, ya que el Miércoles de Ceniza se le dice la frase: "Recuerda que polvo eres y en polvo te convertirás", con lo que se le recuerda que regresa a la tierra de la que salió.
  • Calabaza en tacha: Este fruto ocupa un lugar privilegiado tanto en la cocina tradicional prehispánica como en la actual. Es parte de la tetralogía alimenticia del país, al lado del maíz, el frijol y el chile. De ella se aprovecha todo: tallos, guías, flores, frutos y semillas. En el altar se prepara como dulce: cocida con azúcar, canela, tejocotes, trozos de caña de azúcar o con otros ingredientes, según el gusto de quien cocine. El dulce cristalizado se llama calabazate. La preparación de la calabaza en tacha consiste en introducir dicho fruto en un cesto de palma que se confita en las calderas donde se fabrica el azúcar. Esta es la forma tradicional, pues en las antiguas máquinas de los ingenios se hacía la concentración del guarano o jugo de caña en dos calderas cónicas, colocadas sobre un solo horno (la mancuerna); una de las calderas era la malera, y la otra la tacha. En la actualidad se prepara cocida en miel de piloncillo o panela, antiguamente llamada también tacha para bendecir las casas.[]
  • Papel picado: También se suelen adornar las ofrendas con papel picando que es una artesanía mexicana que se elabora con papel de china recortado con figuras de esqueletos y calaveritas.

Consejos para escoger tu almohada


¿Echas de menos tu almohada en vacaciones…? Es curioso, porque el resto del año apenas reparamos en que es esencial para garantizar nuestro descanso diario. Aquí tienes las claves para hacerte con la más adecuada a tu forma de dormir…


 

Si hacemos caso de la regla de los tercios en la vida diaria, entonces dedicamos un tercio a trabajar, otro al ocio y el último al descanso. Un buen colchón nos garantiza un descanso de calidad, pero a menudo prestamos poca atención a la almohada ¡Grave error! La almohada debe ser cómoda y ayudarnos a mantener la columna vertebral en una postura correcta cada noche para evitar desde falta crónica de descanso a contracturas en cuello y espalda.



Dime cómo duermes, y te aconsejaré tu almohada…

No hay mejor postura, ni peor postura para dormir… Hay simplemente hábitos asentados en cada persona, que pueden ir cambiando con la edad. Por eso, lo principal es conocer la postura al dormir para elegir una almohada acorde a cada necesidad.

·         Si duermes de lado…

Para que el cuello quede perfectamente alineado con la columna vertebral, necesitas una almohada gruesa y firme, mayor cuanto más anchos sean los hombros (por eso, en general, los hombres necesitan aún mayor grosor).

·         Si duermes boca arriba…

El descanso queda garantizado si utilizas una almohada de firmeza y grosor intermedios.

·         Si duermes boca abajo…

Una almohada blanda y fina garantizará tu descanso. Incluso la ausencia de almohada puede ser mejor que dormir con una gruesa, por ejemplo, durante las vacaciones…

CONSEJO: ¡Siempre es mejor probarla! Al comprar una almohada, lo aconsejable es probar varias, en la medida de lo posible… Idealmente, en la posición en que duermes cada noche. Ésta suele coincidir con la que te levantas cada mañana, pero si no lo sabes, pregunta a tu pareja. Aquella almohada con la que te sientas más cómodo será la más adecuada para ti…



Tipos de rellenos para almohadas

El tipo de relleno es un factor determinante en la elección de almohada. Los hay sintéticos y naturales, y suelen ser determinantes en el factor dureza y también en la transpirabilidad…

·         Fibras sintéticas

El relleno de poliéster, una fibra ahuecada y cardada, es el más común. Son las almohadas más baratas y se lavan sin problema. Suelen ser muy firmes, por lo que si no te convencen, siempre puedes descoserlas y sacar parte del relleno. Son apropiadas para dormir de lado o boca arriba, y en general una buena elección para casas de vacaciones.

·         Almohadas de espuma

Las almohadas de espuma tienen un espesor muy variable, según la densidad de la misma. Además, las hay de espuma en un solo trozo o de pequeños pedacitos de espuma… Si no estás seguro de la firmeza, mejor consultar en la tienda. Las almohadas anatómicas suelen estar hechas de espuma. Su forma permite que se adapten mejor al cuello, pero ¡ojo! no todo el mundo las aguante por recomendables que sean… Mejor probar antes de comprar, por lo que está desaconsejado comprarlas en ventas telefónicas y demás…

·         Pluma y plumón

Este relleno natural da como resultado un soporte de poca firmeza, por lo que pueden ser muy adecuadas para aquellos que duermen boca abajo. Transpiran poco en verano, y a personas sensibilizadas les pueden provocar alergia. Son de mejor calidad que las anteriores y duran mucho. Mejor seguir las instrucciones del fabricante en cuanto a limpieza, ya que no se deben lavar…

·         Relleno de látex

Es un material natural que transpira muy bien, y se adapta con facilidad a la forma del cuello. Además es antialergénico..

·         Viscoelásticas

Igual que los colchones, las almohadas viscoelásticas están hechas de espuma de poliuretano. Su principal ventaja es que se amoldan perfectamente a la forma y postura del cuerpo. Igual que ocurre con las anatómicas, no todo el mundo se adapta bien a ellas, por lo que sólo se recomienda su compra después de probarla. Almohadas de gel

Son uno de los últimos rellenos en llegar al mercado. Están rellenas de una espuma de poliuretano con mezcla de polioles sintéticos y naturales (Aloe-Vera). Son de la familia de las viscoelásticas, pero con características propias. Resultan muy frescas y transpirables.

CONSEJO: ¡Atención a la funda de la almohada! Mejor si es de algodón suave y transpira bien, pero debe tener una trama muy fina para evitar que se salga el relleno y penetre la suciedad. Las mejores llevan tratamientos antimanchas y antiácaros.